Vidas Pasadas

... Es que las delicias de la paranoia son incontables. Hoy, en el brindis, todos teníamos ya la copa levantada, y había una gota cayendo por el borde de la copa. (Ya sé que es una imagen trillada, pero el mundo tiene un número limitado de cosas que pasan...)

...Porque hablando de cosas trilladas, decir "brindis trillado" es casi un pleonasmo... Pero en pleno brindis se me ocurrió: Mi copa estaba envenenada. Lo que olía no podía ser alcohol. ¡Ningún trago huele así, ningún vino, ninguna cerveza, nada! Estaba envenenado, así que nada más tenía el tiempo del brindis para decidir cómo no tomarlo.

Contra la mayoría de las reglas de la etiqueta, todos comenzaron a chocar las copas, y el numerito estaba por terminarse, y todos estaban a punto de comenzar a tomar.

Tuve una idea. Era perfecto. En ese momento en el que todos estuvieran distraídos tomando, yo iba a acercarme la copa, y sin probarla,mientras nadie viera, la iba a dejar en la mesa. Genial: Salvada. Si alguien me preguntaba, decía la verdad: no tengo cabeza para tomar.

Luego él se me acercó. Nada más levantó la copa, sin chocarla... Charming, after all... Creo que presentí una mirada cómplice, y lo detesté porque entonces creí que era él el culpable, y que no me equivocaba, mi copa de verdad estaba envenenada. Comenzó a hablarme como si fuéramos amigos desde hace bastante, y amantes desde siempre. Quién diría que hasta ese momento nunca lo había visto.

Comenzó a hacer bromas y a ponerme una mano en la pierna con una confianza que dejé pasar. Incluso me arregló el escote de la blusa como si llevara siglos haciéndolo...Y tuvo la idea.

Pude haberlo detenido...

"Crucemos las copas para el brindis. Vos tomás de la mía y yo tomo de la tuya. Mirá, pasá el brazo por acá."

Qué decir. Pensé que el plan podía ser tan cuidadoso como para haber previsto mi tentativa de escape, por lo que me habrían dado una copa normal, y la de él era la envenenada... Nunca he sido buena diciendo que no, sobre todo no a él, fuera quien fuera.

Nos reímos, coqueteamos, y al final cruzamos las copas y tomamos.

Pude haberlo detenido, pero en las relaciones siempre he sido la que da más...

Mañana el día va a comenzar temprano. Ya en la madrugada me van a anunciar que está muerto. Ya veremos si en la próxima vida topamos con más suerte.

2 comentarios:

Esteban Chi dijo...

"¡Ningún trago huele así, ningún vino, ninguna cerveza, nada!"

La voz de la experiencia jajaja

Andrés A. Villalobos Vargas dijo...

es tan rico besar una boca con vino... no. bueno, algunas bocas... otras son mejor con cerveza y otras con cigarro...

otras sin nada.

que cosas, el vino puede ser perverso.